Con esta verdad cerró su declaración del pasado 11 de marzo, el director general de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus al referirse a la toma de conciencia individual, colectiva y por países, que exigen situaciones de salud pública como la actual. Un llamado a la voluntad, la prevención, la acción y al sentido de cooperación desde su más pura esencia.
Es principio fundamental de vivir en sociedad, entender que lo que te afecta nos afecta y que una acción, por potente, bien intencionada y altruista que sea, nunca tendrá el poder de dos, tres o más, sumadas y articuladas. En la búsqueda del bien común, tanto para prevenir como para curar, la salida es plural pero a partir del compromiso personal, de uno en muchos y de muchos hasta que sean todos.
Este pensar colectivo se requiere con prioridad en la atención a nuestra primera infancia, que como bien consideró la Presidencia de la República, debe quedar siempre incluida en las soluciones preventivo-reactivas que se precisen ahora por la emergencia.
La coyuntura nos muestra una vez más lo importante que es actuar oportunamente y tener resuelto lo esencial, para que sean menos devastadores los efectos de la pandemia. El trago amargo lo vamos a poder superar con respuestas solidarias de todos los sectores. Desde la Fundación Éxito aplaudimos la decisión gubernamental de cumplirles a todos los niños y niñas menores de 5 años, enviándolos a sus casas y garantizando su adecuada nutrición. Nos hacemos presentes para facilitar la realización de este anuncio, beneficiando cerca de 40 mil niños en primera infancia, la mayoría de ellos menores de 2 años, con paquetes de alimentos de alto valor nutricional.
Así complementamos las acciones estatales, y nos unimos para proteger nuestra niñez en el propósito compartido de mitigar el riesgo de todo tipo de desnutrición, una situación que también trae consigo este problema.
En esta causa trabajamos unidos con el gobierno nacional representado por el ICBF, con las Alcaldías de Bogotá y Medellín, y con instituciones aliadas expertas en la atención de la primera infancia y en la distribución de alimentos, que hacen posible la efectividad de llegar a cada uno de los niños y niñas con estas soluciones que hemos dispuesto para ellos.
Los paquetes incluyen leche, huevos y granos altamente proteicos, claves no sólo porque permiten que continúen su sano desarrollo mientras están en casa, sino porque fortalecen su sistema inmune. Estas entregas se han priorizado para los territorios de Bogotá, Antioquia, Bolívar, Tolima, Huila, Meta, Valle y los Santanderes.
Nos inspira la certeza de que la presencia vital para la primera infancia debe iniciar siempre con una nutrición adecuada y nos motiva la confianza en que esta donación se suma a la estrategia de complementación alimentaria del ICBF y de los gobiernos locales prevista ante el COVID -19 como una muestra ejemplar del compromiso colectivo que se debe mantener con la niñez, en especial, en los momentos de crisis.
Aun sabiendo que la incertidumbre es generalizada, y que el sentimiento de zozobra es compartido, la tensión tiene que servirnos desde ya, y no cuando pase, para afrontar las alertas encendidas de vieja data en lo que respecta al bienestar y la salud, sobre todo, de quienes inician la carrera de la vida.
El covid-19 nos deja además como lección que no podemos descuidar ni el día a día, ni los asuntos que teníamos sin resolver desde antes por los niños y niñas. La falta de alimentos nutritivos aminora las capacidades y la resistencia de la población, pero en el caso de los menores de edad y en especial de quienes tienen menos de 5 años, implica además que se altera el desarrollo cognitivo, físico y emocional, con consecuencias casi irreversibles en el futuro.
Sigamos aprendiendo sobre el innegable poder de la oportunidad y la prevención; de observar y acoger lo que a otros funciona. Si nos cumplimos como individuos, como sociedad y como nación, les cumpliremos también a ellos.
Gonzalo Restrepo, Presidente Junta Directiva Fundación Éxito
