Según la OMS, en la malnutrición se diferencian dos tipos de afecciones: en un grupo está la desnutrición que tiene varias manifestaciones y en otro grupo están el sobrepeso, la obesidad y las enfermedades no transmisibles relacionadas con el régimen alimentario (cardiopatías, accidentes cerebrovasculares, diabetes y cánceres).
Situaciones anormales al hablar de desnutrición:
- La desnutrición crónica o retraso en talla: estatura inferior a la que corresponde según la edad.
- La desnutrición aguda o emaciación: referida al peso inferior con respecto a la talla o estatura.
- Las carencias o insuficiencias de micronutrientes (falta de vitaminas y minerales importantes).
Una de las características de la desnutrición crónica es que es un mal silencioso, porque la única señal visible es la deficiencia de talla o estatura. Lo que no se ve es que al cerebro le está ocurriendo lo mismo: no está creciendo normalmente.
El 75% de este proceso ocurre durante los dos primeros años de vida, es decir, en este lapso ocurre la parte más importante del desarrollo, y para que sea normal es vital contar con estímulos esenciales como la adecuada nutrición.
¿Cuáles son las causas de la desnutrición crónica?
La desnutrición crónica se presenta en menores de 5 años por causas como el hambre prolongada, que se refiere a no tener alimentos nutritivos suficientes de forma periódica.
Esta situación conocida como inseguridad alimentaria genera muchas de las afecciones de malnutrición en el mundo; en Colombia es un fenómeno crítico.
Según la ENSIN 2015, más del 54.2% de la población se encuentra en inseguridad alimentaria, lo que indica que 1 de cada 2 no ha tenido en mayor o menor medida acceso seguro y permanente a alimentos en cantidad y calidad, lo que se constituye en un determinante del estado nutricional.
La más afectada es la niñez, especialmente en sus mil primeros días, cuando los requerimientos de calorías y nutrientes son proporcionalmente más altos que en cualquier otro momento de la vida.
La encuesta evidenció impactos sociales en diferentes grupos poblaciones. Por ejemplo, entre la población afrodescendiente la prevalencia de inseguridad alimentaria es de 68.9%, en la indígena es de 77% y en los hogares con jefatura femenina alcanza los 57.6%.
Otras situaciones que causan la desnutrición crónica
Falta de agua potable y de saneamiento básico
el uso de agua contaminada para beber, para lavar manos o para preparar los alimentos genera infecciones gastrointestinales que al presentarse recurrentemente desencadena en desnutrición crónica.
En Colombia: 88.9% de los hogares de las zonas urbanas están conectados a acueducto público, mientras que en las zonas rurales sólo un 15.7%. ENDS 2015
La revista científica The Lancet (2009) sostiene que intervenciones de saneamiento e higiene implementadas con una cobertura del 99% reducirían la incidencia de diarrea en un 30%, por esta vía se disminuiría la prevalencia de desnutrición crónica en 2,4%.
Falta de acceso a servicios de salud
Es un grave problema la lejanía o inexistencia de centros de salud o personal médico para diagnósticos o controles.
Bajo nivel educativo de la madre
Familias sin preparación para manejar situaciones de salud, para brindar mejor alimentación y cuidado a sus hijos.
El estudio de determinantes sociales de la desnutrición crónica -2015, realizado por la Fundación Éxito, con los datos de la ENDS 2010, evidenciaron que los niños hijos de madres con bajos niveles educativos (primaria) aumentaban el riesgo de tener desnutrición crónica en 6 puntos porcentuales.
Problemas de peso al nacer
Determina las posibilidades del niño de sobrevivir y de tener un crecimiento y desarrollo sano durante su vida.
Cuando los niños tienen bajo peso al nacer (menos de 2.500 gramos), tienen una mayor probabilidad de continuar con un crecimiento inadecuado, son niños más propensos a enfermedades prevalentes de la infancia como las infecciones respiratorias, y aumentan el riesgo de tener desnutrición crónica.
En Colombia la prevalencia de bajo peso al nacer es de 9%, pero en ciudades como Bogotá y Medellín, las prevalencias alcanzan el 13,5% y 10,4% respectivamente.
En los niños con peso al nacer superiores a 4.000 gr (macrosomía) aumenta el riesgo de enfermedades como la anemias y la malnutrición.
Desigualdad de ingresos
Existe correlación entre el índice de desigualdad por ingresos (GINI) y la prevalencia de desnutrición crónica en las regiones, de acuerdo con el análisis realizado por la Fundación Éxito con respecto a los resultados de su intervención en la población infantil atendida.
A menor desigualdad, mejor tasa de recuperación. En detalle, el estudio evidenció que un punto porcentual adicional en el índice de GINI (mayor desigualdad) del departamento donde reside el niño, disminuye 1,30 veces la probabilidad de salir del estado de desnutrición crónica, del mismo niño.
¿Cómo saber si un niño tiene desnutrición crónica?
Los niños que sufren desnutrición crónica tienen talla o estatura inferior a la que corresponde por la edad.
Pueden ser más tímidos, se les dificulta más socializar o desarrollar actividades que impliquen concentración; se pueden ver menos activos que los demás y disfrutan menos actividades clave como el juego.
¿Cuáles son las consecuencias de la desnutrición crónica?
Un estudio realizado en Brasil durante varios años, mostró que los niños que tuvieron desnutrición crónica en los primeros años, tuvieron un coeficiente intelectual 14.6 puntos menores con respecto a los que no tuvieron el retraso en talla.
También mostró 5 años en promedio menos de escolaridad y 54% menos de ingresos en los adultos que de niños tuvieron desnutrición crónica.
La desnutrición crónica es además factor de riesgo de sobrepeso u obesidad (malnutrición por exceso), que lleva la doble carga de malnutrición.