Historias PODEROSAS que nutren vidas

En medio de la pandemia Joselyn Navas supo que sería mamá por segunda vez, la noticia sacudió la realidad de su familia. Las dificultades económicas y familiares hacían de cada día una montaña rusa de emociones.

Joselyn tuvo un embarazo complicado y la nueva integrante, por su parte, tenía mucho afán de conocer este mundo, por eso a las 37 semanas de gestación llegó prematuramente a estar con sus papás y su hermanita mayor. Fue una bebé canguro llena de retos. Sin embargo, su llegada trajo consigo alegrías y muchos aprendizajes. Una buena amiga de Joselyn la invitó a inscribirse en la Fundación Solo Vida, ella lo hizo sin saber que allí encontraría un apoyo incondicional.

Nutriendo Vidas

Las puertas se le abrieron desde el primer momento y accedió al programa “Nutriendo Vidas” en alianza con Fundación Éxito. Capacitaciones, charlas y sesiones de antropometría, empezaron a ser parte de la rutina. Joselyn adquirió más poder y conocimientos, y su pequeña que nació pesando 2.630 kilogramos, era una bebé que requería especial atención. Recuerda que aprendió la importancia de las porciones: “la proteína debe ser del tamaño del dedo índice, los vegetales son a libre demanda, sin embargo, debe comer al menos tres arbolitos de brócoli, agregar grasas con una porción de queso y vitaminas con un jugo de guayaba sin azúcar, entre otros tips ”. Se dio cuenta que la calidad es más importante que la cantidad y entendió como una correcta alimentación le aporta física e inmunológicamente a su bebé.

Empezó a recibir alimentos nutritivos, mensualmente iba al Éxito San Antonio para llevar el pollo, verduras, frutas, granos y tubérculos que su familia disfruta. Esta alimentación permitió que Valerie se viera rozagante, sus mejillas redonditas, sus costillas dejaron de notarse y se volvió más activa, curiosa y juguetona.

Una red de apoyo

Joselyn fue acogida por la red de apoyo de la Fundación. Luz Deisy, coordinadora del programa dice “nuestros profesionales brindan atención integral y personalizada a las mamás, identificamos la raíz del problema y creamos el canal para que tengan la atención que necesitan”. Ella recuerda cómo el compromiso de Joselyn le dio el mejor regalo a Valerie: una buena nutrición que evidenció cambios positivos en la niña.

Juan Burgos, nutricionista de la Fundación Éxito resalta como la buena nutrición en los dos primeros años de vida acompañada de lactancia materna, es crucial para un buen desarrollo. “Estudios han demostrado que este dúo se asocia con puntuaciones más altas de coeficiente intelectual, más años
de educación y mayores ingresos mensuales que aquellos amamantados por menos de 1 mes”.

Joselyn se convirtió en la salvadora de su hija, el PODER DEL AMOR la ayudó a superar la desnutrición crónica y le dio las herramientas para que su vida esté llena de oportunidades.

Miles de niños como Valerie, tienen el beneficio de recibir apoyo nutricional gracias a las donaciones que aliados como tu realizan día a día.