¡Estás más preparada que nunca! Tienes amor, te acompaña la esperanza y vas a tener tanta leche como tu bebé necesite. Cada que él tome, tú vas a poder darle más. Aprovecha esta mezcla de magia, sabiduría y poder natural que te ha convertido en fuente de vida, de amor y de alimento.
Muchos saben que la leche materna es alimento, remedio, vacuna, amor, pero nadie puede decirte cómo va a ser la lactancia materna, porque es una experiencia única e irremplazable que mereces vivir con tu bebé.
Recuerda, lo bueno atrae lo bueno. ¿Si comiste proteínas? ¿tomaste más agua? ¿incluiste calorías en tu almuerzo? Si tu alimentación es buena, tu leche materna también lo será.
Y tú, ¿cómo te preparas para lactar a tu bebé?
